Actualmente ejerce como cirujano ortopédico y traumatólogo en el Hospital Arnau de Vilanova – Llíria de Valencia, después de 5 años como interno en el Hospital La Fe de Valencia. Cuenta con 40 publicaciones científicas, cuatro libros completos y fue cum laude en la lectura de su tesis doctoral, “Planificación quirúrgica tridimensional de las osteotomías femorales en el dolor anterior de rodilla”. En los últimos años ha desarrollado 2 becas de investigación competitivas, ha ganado el premio WitheCloud de la Scoliosis Research Society en Los Ángeles (EEUU), el premio a la mejor idea en cirugía ortopédica y traumatología de la SECOT y recientemente el premio SANITAS MIR 2021.
Hoy tenemos la suerte y el inmenso placer de pasar un buen rato charlando en profundidad con el Dr. Joan Ferràs.
Dr Ferràs ¿Qué ha significado a nivel personal y profesional este último reconocimiento?
Es un premio muy bonito, ya que es el único premio nacional a una trayectoria como médico interno residente. El jurado lo forman componentes de Ministerio de Universidades, Sanidad y de Educación, y se evalúa no solo la residencia sino la trayectoria desde la universidad, por lo que fue un premio que me hizo especial ilusión recibir. Es un premio al trabajo de todo el equipo que me ha formado desde que empecé la universidad y una forma de agradecerles el esfuerzo y el tiempo que han dedicado en formarme.
¿Cómo ha sido su trayectoria para llegar hasta aquí?
Muy bonita, en todos los sentidos. He tenido la suerte de encontrarme en el camino con gente increíble que me ha motivado y estimulado para desarrollar mis proyectos, y poco a poco, alguno ha salido. No salen todos los que empiezas, pero cuando uno sale, motiva a seguir con más y cada vez mejores, y eso llena mucho a nivel personal y profesional.
Mucho trabajo, si puede llamarse así. Tengo la suerte de que me encanta la tecnología, y en traumatología y cirugía ortopédica la innovación tecnológica va ligada a las nuevas técnicas quirúrgicas, métodos de planificación y la mejoría en el diagnóstico y atención de los pacientes, por lo que se podría decir que mi hobby y mi trabajo no están muy lejos. Eso es una suerte tremenda que me hace disfrutar mucho el camino.
…se podría decir que mi hobby y mi trabajo no están muy lejos. Eso es una suerte tremenda que me hace disfrutar mucho el camino.
Y a lo largo de ese camino… ¿ha tenido que apartar alguna piedra?
¡Muchas! pero no en sentido negativo, no como cosas duras que haya tenido que superar, sino como retos que conseguir. Cuando se empieza un proyecto es absurdo pensar que va a ir todo rodado a la primera, siempre habrá que superar problemas, y a veces, sabes cómo empiezas el camino pero no como acabas. Superar problemas te hace ser más flexible a la hora de enfrentarte a dificultades y saber asumir cuando hay cosas que no puedes superar.
Quien hace cosas le pasan cosas, y conforme vas avanzando vas conociendo a gente, vas entendiendo cómo funcionan las cosas… y vas aprendiendo a hacer las cosas, pero marcando tu forma de hacerlo.
Lo más importante es la salud, aunque sea un tópico, pero es así. Por suerte a nivel personal ha ido todo rodado, tengo un ambiente a mi alrededor que valora mucho lo que hago y me anima a “meterme en más líos” y así las dificultades es más fácil superarlas.
¿En qué proyectos a corto plazo está trabajando ahora?
La realidad virtual y realidad mixta me parecen una herramienta chulísima en cirugía ortopédica. Es muy barata, muy rápida y da mucha información. Es una forma muy práctica de comprender las deformidades en cirugía ortopédica y las fracturas en traumatología. Está todavía en sus comienzos, pero tiene un potencial increíble y creo que vale la pena crear herramientas accesibles basándonos en esta tecnología.
¿Por qué la especialidad de traumatología?
Es una especialidad muy completa y clínica, muy lógica. Siempre me han gustado los números, las matemáticas y la física, y dentro de la medicina, quizá esta sea la especialidad más cercana a esas áreas. Trabajamos con pares de fricción, fuerzas, ángulos, vectores… Somos los “arquitectos del cuerpo humano”, nos dedicamos a corregir deformidades, restablecer la morfología y la función normal… es muy diferente. Pero no por ello menos clínica: es una especialidad que depende mucho de nuestras manos, de las sensaciones con el paciente. En traumatología hay que tocar, sentir si hay que hacer “mucha o poca” fuerza para ver si un ligamento está tenso o no… es muy manual. Y además es una especialidad con patología muy frecuente: todos pasaremos por el traumatólogo varias veces en nuestra vida. Desde un niño de 1 año hasta un paciente de 90 años, traumatología tiene un abanico de patología increíblemente grande, y es una especialidad imposible de conocer al 100%. No será la única, pero bueno, creo que es una especialidad muy pero que muy completa.
¿Cómo y cuándo empieza a interesarse por la tecnología 3d?
La verdad es que fue de casualidad. Me compré un ordenador cuando era residente de segundo año que tenía instalado por defecto un programa de 3D, y empecé a trastear. La impresión 3D fue la primera vez en la que pude sacar, al mundo real, un objeto virtual, y me fascinó. Podemos diseñar un objeto aquí y en nada tenerlo físicamente en la otra parte del mundo. Además a un precio increíblemente bajo, de modo que me compré mi primera impresora 3D (por 180 euros, no podía pagar mucho más) y empecé a “jugar”.
A partir de ahí, la cosa se complicó y ahora mismo tengo varios registros de propiedad intelectual, comunicaciones, libros y… ¡no os voy a decir cuántas impresoras y gafas de realidad virtual!.
¿Qué es lo más le gusta o apasiona de su profesión?
La capacidad de resolución que tiene. La cirugía ortopédica y traumatología es la especialidad que mayor calidad de vida da del mundo, y no es un dato al azar. Tratamos principalmente dolor, y cuando quitas el dolor a un paciente, te lo agradece mucho. Le permites volver a correr, a jugar… y ya si nos ponemos románticos, permite volver a coger en brazos a sus hijos, a sus nietos… Es una especialidad que soluciona y cura muchos problemas, y eso es muy gratificante.
La cirugía ortopédica y traumatología es la especialidad que mayor calidad de vida da del mundo, y no es un dato al azar.
¿Y lo que menos?
Que el dolor no se puede medir. En cirugía ortopédica tratamos dolor, y es difícil medir cuánto dolor hay. Esa incertidumbre es difícil de manejar, y más si te gustan tanto las matemáticas y la exactitud como a mi. En medicina 2 y 2 no son cuatro, y en traumatología, menos aún. En muchas áreas de conocimiento puedes predecir con mucha precisión qué va a ocurrir tras un gesto terapéutico, pero en traumatología, cada paciente es un mundo y hay tantas variables a controlar, que todavía hay muchas cosas que no conocemos: la edad, las demandas funcionales del paciente, su situación social y de salud previa, la calidad ósea, las expectativas de la cirugía… son muchas cosas a tener en cuenta a la hora de tomar una decisión. Por eso, a veces una prótesis perfecta, por ejemplo, produce dolor, y en ocasiones, no sabemos todavía por qué es.
Eso, junto a la enorme carga de trabajo que tenemos, por la alta demanda que existe, hace que tengamos que tomar decisiones, conjuntamente con el paciente, en poco tiempo, muchas veces, menos tiempo del que se tiene para valorar a un paciente en su conjunto. Eso genera estrés, y el paciente es quien nunca debe de sufrir las consecuencias, por lo que es a los traumatólogos a quien nos toca “cubrir” las carencias del sistema con mayor esfuerzo, preparar las consultas en el tiempo libre.
Dr. Ferràs, cuéntenos un poco… ¿cómo es su día a día?
Si soy sincero, casi nunca tengo dos días iguales. Hay una parte constante de mi día a día que es el tiempo en el hospital. El resto del día, va cambiando cada semana: preparar cursos, proyectos, avanzar en proyectos previos, estudiar… Cada día es un mundo, pero siempre intento dejar tiempo para mi vida personal. La noche es un momento muy bueno para estudiar, hay tranquilidad y es de los pocos momentos del día en el que puedes encadenar 2 o 3 horas consecutivas, que hacen avanzar mucho.
¿Qué le diría a su “yo” de hace unos años, cuando empezó la carrera de Medicina?
Que mientras no engañe a nadie, sea sincero y mantenga su integridad y sus principios, que adelante. Cuando entras en proyectos y haces cosas nuevas o diferentes, muchas veces no sabes si son proyectos que te quedan grandes, o que son para gente más mayor o experta, más avanzados en su carrera.
Siempre he hecho cosas diferentes, no mejores, ni más difíciles, simplemente diferentes, y eso siempre genera ciertos comentarios a tu alrededor, algunos buenos algunos malos. Hay que escucharlos todos, y aprender a diferenciar a la gente cuya opinión realmente vale la pena escuchar. Pero mientras mantengas las normas que he dicho antes, puedes avanzar con el proyecto tranquilamente, y ya veremos dónde llega el camino. No hay que tener miedo a probar cosas.
¿Cómo ve el futuro de la investigación y la traumatología en nuestro país? ¿Cómo o dónde se ve en 10 años?
La verdad es que no sé dónde estaré la semana que viene, así que en 10 años… ¡quién sabe! Ahora por primera vez tengo un grupo de trabajo en el que me siento muy orgulloso de estar. Es investigación y desarrollo al máximo nivel. He tenido mucha suerte de conocerles y de que mis proyectos se conjugarán bien con los proyectos de la compañía. Cuando estás acostumbrado a desarrollar proyectos solo, y hacerlo tú todo, te sorprendes cuando entras en una compañía con tanta estructura y gente que sabe tanto de cada área. Eso hace que los proyectos cojan vuelo y que los beneficios que se puedan derivar de las ideas o de los proyectos que tengo, puedan llegar a mucha gente. Es realmente estimulante trabajar con un grupo así, y siento por una parte respeto por la responsabilidad en la que me siento y por otra emoción por saber que tengo un techo muy muy muy alto, que difícilmente llegaré a tocar.
Actualmente solo hay una compañía en España que tenga la estructura y el desarrollo suficiente para fabricar productos sanitarios clase III. Es importante apoyar a las compañías, porque en ellas está gran parte de la investigación y el desarrollo. Las compañías dan solución a problemas clínicos de la población, para mejorar su calidad de vida y mejorar su estado de salud, y en esto, hace falta potenciar lo que tenemos. No por simplemente ser empresa nacional, sino porque es realmente buena. La Agencia Europea del Medicamento (EMA) es una institución de las más severas y restrictivas a la hora de conceder licencias, y en España tenemos una compañía que tiene todas las licencias para fabricar implantes al máximo nivel. Eso no es casualidad, es fruto de un trabajo de precisión y calidad de los procesos y los implantes. Las normas son iguales para todos los países, y parece que las compañías externas tienen mejor material que las empresas españolas, y es que a veces parece que el santo de más lejos hace más milagros.
Tenemos que apoyar que las empresas españolas sigan haciendo lo que hacen, y que podamos investigar y desarrollar herramientas desde nuestro país, porque sabemos, podemos y debemos. Eso es retener talento, y debemos potenciar que las ideas que se tienen aquí repercutan en patentes nacionales, que a su vez repercutan en beneficios en empresas españolas que den trabajo a nuestra población, que traigan dinero para soportar nuestro sistema de seguridad social y que contribuyan a un sistema cada vez más excelente y con más recursos. Solo de esa forma tendremos una sociedad cada más avanzada y más potente.
Las normas son iguales para todos los países, y parece que las compañías externas tienen mejor material que las empresas españolas, y es que a veces parece que el santo de más lejos hace más milagros.
Tenemos que apoyar que las empresas españolas sigan haciendo lo que hacen, y que podamos investigar y desarrollar herramientas desde nuestro país, porque sabemos, podemos y debemos.
Y por último, ¿con qué sueña el Dr. Ferràs?
A nivel profesional, con que no se me acaben nunca los proyectos, y que cuando un proyecto se acabe, o se tuerza, que aparezca otro igual de apasionante. Me encanta poder compaginar los proyectos de desarrollo con mi actividad asistencial habitual, así que ojalá encontremos soluciones a problemas del día a día que ayuden a cuanta más gente mejor.
A nivel personal, que no cambie nada, que Clara siga disfrutando de mis proyectos como ha ocurrido hasta ahora, que mi familia siga ilusionándose con mis avances y que siempre tenga un rato para tomarme unas cañas con los amigos.
JOAN DE CERCA…
- Si no hubiera sido médico… «Creo que la ingeniería industrial, matemáticas o física me hubiera encantado».
- Un libro que recomendaría… «El príncipe de Maquiavelo, y también El Principito de Antoine de Saint-Exupéry».
- La última película que ha visto… «Una comedia romántica: Hasta que nos volvamos a encontrar… y así es».
- Una canción… «19 días y 500 días después, de Travis Birds y Benjamín Prado».
- Un viaje pendiente… «La India».
- A qué dedica su tiempo libre…«Salir a la montaña, y quedar con los amigos y la familia. Tengo que confesar que mi primera respuesta era “a programar y desarrollar mis proyectos” pero supongo que eso no se puede considerar tiempo libre, ¿no?
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